La Municipalidad de San Antonio a través de su Departamento de Salud brinda apoyo a estos pacientes, la mayoría de ellos adultos mayores El terremoto del 27 de febrero de 2010 es una fecha que marcó física y emocionalmente a María García, quien por ese entonces vivía junto a su esposo Luis Leiva en Tejas Verdes, a escasos metros de la desembocadura del Río Maipo. Aseguró que a partir de ese momento y a raíz de su angustia y miedo por las evacuaciones y replicas comenzó a debilitarse su salud lo que sumado a una depresión y crisis de pánico, la hizo ponerse en alerta de que algo no andaba bien. La enfermedad de parkinson se manifestó en ella un año más tarde con episodios de rigidez y dificultad para caminar. De pronto la marcha fue más lenta, señal que fue advertida desde un principio por su esposo Luis, quien la apoyó y acompañó en todos sus exámenes médicos. “En las primeras visitas al doctor me hacían levantar un brazo y se me caía, me hacían levantar una pierna y lo mismo, fueron días muy difíciles”, contó María. Asimilar su enfermedad no fue fácil. Los primeros meses no habían ganas de vivir, ni siquiera de levantarse de la cama, situación que se revirtió con una luz de esperanza que hoy la mantiene más optimista y dispuesta a dar la batalla: La rehabilitación física y emocional que recibe del Centro de Rehabilitación de Llolleo, lo que le ha permitido compartir su experiencia con otras pacientes y recibir la ayuda de sicólogos, fonoaudiólogos, médicos y kinesiólogos, entre otros profesionales. “Me siento mejor ahora, me cambié de casa, estoy más renovada, los malestares siguen pero no son tan fuertes, asumí esta enfermedad, acá me dan ánimo y me ayudan mucho”. El apoyo de un cuidador es clave para la rehabilitación de pacientes con Parkinson. En el caso de María, el amor y apoyo de su esposo Luis ha sido muy importante. Él le ha brindado los cuidados necesarios y se ha convertido en un estudioso de esta enfermedad. “Uno al principio ignora muchas cosas, yo no sabía cómo tratarla, de qué manera atenderla, es por eso que decidí informarme, busqué orientación y asistencia médica. Fuimos golpeando puertas y mientras eso sucedía no había progreso físico en ella por lo que fuimos derivados a este centro en Llolleo donde hemos recibido atención especializada de parte de todo el cuerpo profesional, nos sentimos muy apoyados, y gracias a la buena atención mi esposa ha ido recuperando terreno”, dijo. Luis afirmó que la ayuda ha sido positiva pero que no existiría progreso si no existiera además el apoyo y la contención familiar que, asegura, es clave para el tratamiento de su amada María. “El cariño y preocupación de los seres queridos es muy necesario, es tremendamente valioso y es algo que hay que recalcar a todos quienes pasen por una situación como la que estamos viviendo nosotros como matrimonio”. Los avances de María la han ayudado a asumir esta enfermedad con más energía. Su kinesiólogo, Sergio Rohten, destacó las ganas de rehabilitarse que tiene ella y los demás pacientes y la labor que se desarrolla a diario en los centros de rehabilitación existentes en San Antonio: CCR Bellavista, CCR San Antonio de Padua y CCR Llolleo. “El trabajo es en equipo en la cual tratamos de ver todos los aspectos que tiene esta enfermedad, lo motor, lo cognitivo, lo emocional, realizamos terapia individuales y grupales. La enfermedad de Parkinson se manifiesta distinto en cada uno, por tanto es necesario un trabajo más independiente con cada paciente”. Agregó que “esta enfermedad afecta más a hombres que a mujeres y ocurre en el cerebro en una zona que se llama sustancia negra en donde hay un neurotransmisor que se llama dopamina y se encuentra más disminuido en este tipo de pacientes. Lamentablemente es el que controla los movimientos, aún no se sabe por qué da, hay muchas teorías e investigaciones es por eso uno debe estar preparado para que le pase a uno, a un familiar, a un vecino, compañero de trabajo o un cercano”. Otro caso de Parkinson en vecina de Viuda 3 El temblor involuntario de su cuerpo fue el primer síntoma que tuvo María Valladares, vecina del sector de la Viuda 3 y compañera en Rehabitación de Maria García. Asumir en un comienzo la enfermedad tampoco le fue fácil pero de a poco le ha ido encontrando un sentido a todo lo que está viviendo y lo hace con esperanza y con el apoyo de sus familiares y los profesionales de salud. “Asumo mi enfermedad y trato de que no vaya en aumento, es por eso que vengo a este centro donde me ayudan harto con muchos ejercicios, acá hago bicicleta estática, trabajo en paralelas y recibo ayuda de la fonoaudióloga que me ha hecho muy bien ya que cada avance que tengo me da más ánimo y fuerza, cuando llegué al centro por primera vez venía caminando apenas y ahora subo en un dos por tres las escaleras”. Abril: Mes del Parkinson Durante el mes de abril se conmemora el Mes del Parkinson. Se calcula que unos cuatro millones de personas padecen la enfermedad de Parkinson en el mundo; una patología crónica que ataca el sistema nervioso central, cuyo avance va afectando el movimiento, causando falta de coordinación, rigidez muscular y temblores.