El titular del MOP, Juan Carlos García, ordenó revisar la decisión adoptada en la pasada administración que permitió que partes del recinto presenten una protección al fuego inferior a lo establecido y otras no cuenten con tratamiento alguno, lo que obligará a la realización de nuevas obras durante los próximos meses para cumplir con la normativa.
Ante el reciente conocimiento de que las estructuras horizontales y verticales del Estadio Municipal de San Antonio cuentan con una protección al fuego inferior a la exigida por la normativa y que incluso parte de ellas carecen de tratamiento, el Ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García, instruyó la realización de una exhaustiva investigación técnica y administrativa respecto a los fundamentos que existieron en 2019 para aprobar modificaciones de contrato que posibilitaron este resultado, de manera de definir las eventuales responsabilidades y sanciones que procedan y, paralelamente, concretar los nuevos trabajos en el menor plazo posible.
El MOP informó de estos nuevos antecedentes a la Municipalidad de San Antonio y al Instituto Nacional del Deporte, mandante y financista de la obra, respectivamente. Además, esta semana un equipo especializado de la Dirección de Arquitectura del MOP inició un peritaje en el estadio para dimensionar la magnitud del incumplimiento y establecer los plazos e inversión requerida para su solución, información que se entregará en los próximos días cuando concluya dicha evaluación.
Según el análisis preliminar del MOP, durante la ejecución de la obra, con acuerdo de las tres partes, en 2019 se realizaron dos modificaciones de contrato que, por un lado, permitieron disminuir la capacidad de resistencia al fuego de la estructura y, por otro, autorizaron que algunos elementos no posean protección alguna contra incendios, como es el caso de las losas colaborantes.
“Se trata de un problema grave e impresentable, por el cual estamos respondiendo con prontitud como Ministerio, haciéndonos cargo de la indignación que con justa razón debe sentir toda la comunidad de San Antonio. Aquí se puso en riesgo la seguridad de los usuarios de este estadio, por lo que resulta difícil justificar las decisiones que concordaron las administraciones anteriores del MOP y de la Municipalidad”, manifestó el Seremi de Obras Públicas, Yanino Riquelme.
La alcaldesa Constanza Lizana comentó que “si se hubiese atendido lo que esta administración siempre planteó responsablemente, el estadio hoy estaría en uso. Sin embargo, hubo quienes, buscando obtener una pequeña ventaja política, sólo querían cortar una cinta, en lugar de resolver los graves problemas de la obra del Estadio Municipal. A diferencia de lo obrado por el MOP en tiempos de Sebastián Piñera y la anterior alcaldía, nosotros seguiremos trabajando por lograr la apertura del Estadio en el menor tiempo y en óptimas condiciones”.
Lizana agregó que “esta alcaldía seguirá trabajando por lograr la apertura del Estadio en el menor tiempo y en óptimas condiciones. Aquí hay responsabilidades por el atraso de años, los errores en el diseño y la ejecución de la obra, y se tienen que investigar. Aquí se le hizo daño a San Antonio”.
El seremi del Deporte, Leandro Torres, condenó las decisiones adoptadas por la administración anterior, señalando que “los principales afectados son los y las deportistas de la zona que, a cuatro años del inicio de las obras, todavía no pueden contar con un recinto que les permita desarrollar sus entrenamientos. Vamos a trabajar con el MOP y con el Municipio para generar las condiciones que permitan avanzar lo más rápido en la habilitación de este estadio”.
Como primera medida, se encargará la realización de un nuevo estudio de resistencia al fuego de los elementos estructurales horizontales, elementos estructurales verticales y todas las techumbres, tanto de las graderías como de los recintos menores. Asimismo, durante las próximas semanas se efectuarán gestiones para formular una modificación del proyecto ante el Ministerio de Desarrollo Social y Familia y posteriormente proceder a la licitación de estas obras, para que estas comiencen a ejecutarse en el mediano plazo.
Junto con la necesidad de estas reparaciones para cumplir con la normativa de resistencia al fuego, el MOP procederá con otras dos líneas de acción. Por un lado, en la modificación del proyecto se incluirán los cambios que se requieren para su regularización ante la Dirección de Obras Municipales y despejar la tramitación de la recepción municipal. Por otro, el MOP evaluará las acciones a seguir para cumplir con la subsanación de todas las observaciones formuladas en el proceso de recepción definitiva del contrato, parte de las cuales no fueron cumplidas por el contratista dentro del plazo que venció el 29 de agosto pasado.